Mensaje del 25 de enero de 2025

“¡Queridos hijos! En este año de gracia os invito a la conversión. Poned a Dios, queridos hijos, en el centro de vuestra vida y los frutos serán el amor hacia el prójimo y la alegría de testimoniar; y la santidad de vuestra vida llegará a ser el testimonio verdadero de la fe. Gracias por haber respondido a mi llamada.” (Con aprobación eclesiástica)