Querida amiga, tengo noticias desafortunadas.
En particular, el virus covid-19 ha llegado a este monasterio donde vivo desde hace siete años. Desde ayer, dos frailes – yo y otro más -, y tres monjas, todos somos positivos.
Si recuerdas, te dije el miércoles por la mañana que rezáramos por el Papa, que también está en riesgo, pero puse también mis necesidades en tus oraciones. El martes por la tarde, sentí fiebre, escalofríos, respiración con sibilancias, típico de mí, cuando tengo la gripe, debilidad en la parte superior de la espalda. Por la mañana, ya tenía una temperatura no mayor de 37,7-8°. Llamé a mi hermana, que me trajo la medicina. Mi temperatura ha bajado en estos días, no tenía problemas respiratorios, podía respirar normalmente sin ninguna molestia. Pensé que eran los síntomas normales de la gripe, la temperatura se mantuvo en el valor límite, unos 37°, ligeramente superior. Ayer la prueba dio positivo, en definitiva, una ligera infección.
Al enterarme de una Hermana que dio positivo y está hospitalizada en Mostar, no asocié mi condición médica con el coronavirus.
Desde que se dictó la prohibición de salida, no he ido a ningún sitio de esta casa o al patio, ni he puesto en marcha mi vehículo, he cumplido con las normas. Pero alguien trajo un virus a la casa; aquí hay 23 Hermanas y la mayoría son mayores. Hermanas que han dado sus vidas a Dios y a la Iglesia, y han pasado sus viejos tiempos aquí, pero son persistentes en la oración. Están en peligro, bueno, ahora todo está en las manos del Señor y del doctor.
Por favor, pongan a todo este monasterio y a las Hermanas infectadas en sus oraciones, pues las tres trabajan en la Aldea de la Madre.
¡Pedimos al Señor que nos libre del mal de este monstruo!
Tomislav Pervan
Fuente: www.rosasparalagospa.com