El domingo 18 de noviembre 2012, por la tarde, tuvimos el Encuentro de oración con la Reina de la Paz, en la Parroquia de San Bartolomé, en este Año de la Fe.
Fue un Encuentro entrañable y emotivo y sería hermoso que los numerosos asistentes relataran en primera persona su experiencia y emoción personal.
Estoy segura de que en algo coincidiríamos todos: en que sentimos Paz y la Presencia amorosa de Nuestra Madre y de Jesús. Nuestra Fe y amor al Señor se afianzó mucho más, al igual que nuestro deseo de colaborar en el plan de salvación que nos trae desde Medjugorje (Bósnia), la Reina de la Paz.
El templo, en penumbra, estaba adornado e iluminado por numerosas velitas rojas y blancas, creando un clima acogedor.
Di mi testimonio, de cómo a los 17 años perdí (durante 10 años) mi Fe fervorosa de niña, y cómo por medio de la Virgen la recuperé 10 años después, en 1986, y como Ella ha hecho que me enamore más y más de Jesús. Tras mi conversión me percaté de cuántos peligros rodeaban a mis 4 hijos y, para protegerlos, los consagré a la Virgen, se los entregué para que Ella fuera su Madre (María pidió que nos consagráramos a Ella en Fátima, en Medjugorje, y los Papas también han insistido), y le pedí que estuviera siempre a su lado y los llevara al Cielo.
Mis hijos de mayores han renovado dicha consagración muchas veces y Ella los ha protegido de innumerables peligros (de cuerpo y alma) y ha hecho que en su adolescencia se enamoraran totalmente de Jesús y tengan ahora una Fe fuerte, firme, que desean con todo su corazón compartir con otros jóvenes.
Conté nuestro viaje allí (1988) y nuestro deseo imparable, después, de transmitir a todos aquello… He tenido la dicha de ir 5 inolvidables veces, que me han marcado profundamente y para siempre (como a 40 millones de peregrinos).
Tal y como La Virgen pide y desea, todos los presentes le regalamos un ramo de 50 rosas (espirituales) rezando el Rosario, contemplando junto con Ella los Misterios de la vida de Jesús, y pidiéndole por sus Intenciones: la Paz, los sacerdotes y consagrados, la conversión de los que no viven su Fe, los enfermos, las familias, los jóvenes y los niños…
El sacerdote, con Jesús en la Custodia, se acercó y bendijo a todos los presentes. La gente se conmovió al ver acercarse a ellos a Jesús (como en su tiempo por Galilea) para bendecirlos en sus sufrimientos y necesidades.
El P. Andreu (valenciano, de 26 años) compartió su emotivo testimonio de cómo en Medjugorje se afianzó enormemente su deseo de santidad, de entrega al Señor y a todos, y cómo sintió que la Virgen aceptaba y acogía amorosamente su corazón con Sus manos.
Durante la Eucaristía nos explicó cómo la Virgen viene a recordarnos las Enseñanzas de Jesús y nos propone 5 piedras (como lo hizo David) para vencer a nuestro propio Goliat (pecados, tentaciones, infidelidades) y convertirnos en apóstoles suyos y colaborar en el Plan de salvación del Mundo que Dios tiene, y que para ello la envía. La Virgen nos repite: “Te necesito”. Nos pide: oración diaria con el corazón (Rosario), meditar la Biblia y llevarla a la vida, Eucaristía, confesión mensual, ayuno y sacrificios (que fortalecen nuestra voluntad).
Luego escuchamos el mensaje de la Virgen (sept. 2012) mientras veíamos un vídeo de Mirjana en éxtasis, contemplando ella a la Virgen: su cara resplandeciente, iluminada, y ver cómo le hablaba y escuchaba atentamente, sus gestos tan expresivos de alegría, tristeza, sus lágrimas… nos conmovían profundamente… Mirábamos los ojos que estaban viendo (por privilegio de Dios) a nuestra Madre…, y en el corazón nos sentíamos mirados por Ella.
Luego animé a consagrarnos a la Virgen para, como niños pequeños, ponernos en sus Manos protectoras y entregarle también nuestros seres queridos. La gente en silencio se consagró a María y se acercaron llevando emocionados, con lágrimas en los ojos, en una mano la velita encendida que les representaba a ellos mismos y en la otra mano otra velita (de las que adornaban los bancos) que representaban a sus seres queridos que no estaban en el templo, y ponían ambas velitas a los pies de la preciosa Imagen de la Reina de la Paz. A sus pies entregábamos tantas necesidades y sufrimientos… Ella nos ayudará aún más, en adelante.
La Eucaristía muy vivida, con cantos preciosos como los que se cantan en aquel Santuario, al que ya visitan anualmente más de 1 millón de peregrinos (especialmente jóvenes). Algunos días (del pasado verano) la Misa fue concelebrada por 500 sacerdotes.
Gloria Chopitea, que organiza Peregrinaciones desde Tarragona, nos contó brevemente el inicio de las Apariciones, los jóvenes videntes y los Mensajes de la Virgen. Y cómo Benicarló es especialmente amado por la Virgen, pues pocas ciudades de España han tenido el privilegio de tener la visita de una vidente (nov.1992) y tener la Imagen de la Reina de la Paz (sólo hay 4 en nuestro país).
Nuestro deseo es formar en nuestra Parroquia un grupo de oración que nos reunamos periódicamente para profundizar en Sus mensajes y rezar por Sus Intenciones.
El Acto finalizó con un vídeo, viendo a 80.000 jóvenes postrados rezando al Señor, y cantando y brincando felices, en el santuario de la Reina de la Paz.
Salimos con una gran paz interior y felices, conmovidos por haber percibido dulcemente la Paz y el Amor que nos trae nuestra Madre, de parte de su Hijo Jesús.
Ella dice siempre en Medjugorje: “Alabado sea Jesucristo”. Nosotros respondemos como los videntes: “Alabados sean Jesús y María”. Ella sonríe y nos dice, “Gracias por haber respondido a mi Llamada”.
María Lourdes Palau
Benicarló (Cs)